Nada como la familia
Categoría: Día a día
El viernes pasado Blacky volvió con su familia . Esperamos que recordéis que os contamos que era un perro muy descentrado por lo estaba viviendo, que necesitaba, creíamos, equilibrio y que se le dejara entender. A los dos segundos de llegar a su barrio y de que avistara a sus chicas fue otro; fue tal el cambio de expresión que experimentaron su cara y su cuerpo que se nos puso carne de gallina. Le sentimos feliz, le sentimos respirar, le sentimos vivo. En FEEL había ido haciéndose pero desde luego no era él, cuando vio a su familia se reencontró. Nos cuentan que está contento, cariñoso y tranquilo, y que ya no las lleva volando en los paseos . Nos alegra haberle cuidado pero aún más saberle en casa.