Soya, su mirada te ilumina
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Recibimos muchas llamadas de personas preocupadas, en situaciones difíciles, y algunas transmiten enorme ternura y desasosiego por el futuro de su familia animal; y no son solo las palabras. Julio, casi octogenario, nos contactó hace tiempo porque donde tenía que irse no podía llevar a su compañera Soya. Tras nueve años de vivencias y apoyo, la situación les obligaba a separarse, Julio buscaba un sitio cerca, para retrasar lo más posible la fecha, para igual poder visitarla…El en Almería, nosotras en Madrid, lo de las visitas no iba a ser muy factible. Estuvimos en contacto unas semanas y finalmente nos llamó: “Hola, sois lo menos malo que he encontrado para mi Soya, ¿os la llevo?”, por extraño que os suene, había mucho cariño en sus palabras.
Y Soya está en FEEL, y es tierna y alegre, y se pega carreras y dormita al sol, con abrigo que Madrid no es Almería. Y Julio no la visita, pero sabe de ella, y la ve en fotos y videos, y dice que la ve contenta. Y nosotras pensamos que en cuanto encontremos una familia que la quiera y cuide, habrá mucha tranquilidad para ambos.
En estos momentos Claudio vuela a Italia. Tras varios años en situación de calle, su hermana le ha comprado un billete para que pueda pasar las navidades con su madre en familia. Solo había un bache: Rocco, su compañero de vida durante los últimos once años. Sin apoyos ni recursos que pudieran hacerse cargo de él, Claudio iba a tener que cancelar el viaje. A través de su trabajadora social se puso en contacto con FEEL, por si podíamos cuidar de su Rocco unas semanas hasta que él volviera de Italia. 
Desde ayer está con nosotras, es un abuelete tranquilo y bonachón, que aunque echará de menos a su compañero, disfrutará de paseos tranquilos y de mucho cariño. No era justo que a estas alturas sufrieran una separación definitiva o que Claudio no pudiera estar con su madre. Suena a historia de Navidad, pero es que la vida son historias.
Por favor, mirad el cambio en su expresión. no es solo no tener ya frío físico, es no tener miedo, es sentirse en familia y que el choque con lo desconocido sea al menos, cálido. Nala está mucho mejor, y eso hace que Vicente esté mejor. Ayudando a Nala se ayuda a Vicente. Acoge, es una labor que irradia en muchos sentidos, incluso hacia ti 

Tras ser evaluado por varios educadores caninos, se confirma que Pelayo es un perro inteligente, atento y sensible, con unos niveles de frustración muy altos. ¿Cómo nos muestra su frustración? Enganchando la correa con la boca cuando sale, de una manera tal, que imposibilita el paseo. ¿Cómo se da en adopción un perro que, hoy por hoy, no puede salir a pasear? Pues complicado. Pero todas sabemos de perros de chalet que no salen a pasear, a pesar de hacer vida casera y ser muy queridos, y esa podría ser una opción perfecta para Pelayo (sociable, cariñoso, tierno). Pelayo necesita sentirse parte de algo, de una familia, tener su atención, establecer un vínculo, trabajar su cabeza y corazón; con eso, ¿Quién se siente frustrado? Sus niveles serían otros, los pasos a seguir otros.

Es super sociable con perros y personas, muy alegre y cariñoso, va sonriendo por el campo olisqueando cada centímetro, es feliz con las margaritas, las briznas de hierba y los matojos, no le pone mala cara a nada, no da un ruido, en chenil es muy tranquilo y limpio, le interesa la gente y se queda a su lado. Es un perro muy tierno que busca una nueva familia; saberle bien dará mucha paz a quienes le cuidaron desde pequeño. Será un gran compañero.

