El enfado de Marte

Hay enfados y grandes enfados como el que tenía Marte el viernes cuando fuimos a verla. Llevaba sola en casa desde el lunes cuando su humano fue hospitalizado. La médico que le atendía dió el aviso de la gatita sin atención en casa y de que, aunque él decía que le había dejado comida y agua, no era seguro ni sabían cantidades.

 

Cuando te hospitalizan de urgencia todo se distorsiona. Fuimos al hospital a recoger las llaves de la casa y a conocer a Juan Carlos que se encontraba algo mejor, y de ahí, a ver a Marte. Es pequeña y preciosa y, o bien tiene una mala uva de infarto, o bien tenía hambre, sed y mucha falta de su compañero. Comió con ganas y nos lanzó porrón de zarpazos a los zapatos…. Le hicimos eso sí alguna foto y videos para que Juan Carlos se quedara tranquilo sabiendo que ella estaba ¡enérgica y con muchos ánimos! Seguiremos yendo a verla hasta que su humano vuelva a casa lo que debería ser en pocos días, esperamos que nos vaya recibiendo con más ternura, y si no tampoco es grave mientras ambos estén cuidados y evolucionando bien.